Caderas al viento

Escucha a Rosa contarte sobre el Turca, dale al play

Si hubieras nacido rubia y con ojos azules 
te harían princesa de un mundo irreal.

Con las orejas de punta 
y la cola mutilada, 
al observarte dirían:
¡Oh, qué monada!  

Si no fueras como eres, 
divertida y alocada, 
te pondrían ahí afuera, 
a cuidar la fachada.

Tu no sirves para alarma, 
no estás hecha para pelear, 
tu no te vendes, ni te compran,
viniste al mundo para bailar.
A todos los que llegan a verte, 
los recibes con ritmos y juguetes.

Corriente, callejera, 
como te quieran llamar, 
no me ofenden ni te ofendas, 
¡tú eres especial!

No necesitas de razas 
para tus caderas mover, 
para querernos y cuidarnos 
a todos a la vez

A Turca y a todas y todos los de raza canina tachada de peligrosa. (Sí hay que tener cuidado, te podrían dar un ataque de amor).

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